Según han informado, en una inspección realizada el pasado verano, la Policía Local detectó que un local con licencia de restaurante funcionaba como discoteca. Además, disponía de aparcamientos sin permiso y había instalado una zona de actividades infantiles y una caravana, también sin autorización.
Después de detectar la situación, han explicado, el Consistorio dictaminó una orden cautelar de cierre de los espacios exteriores e inició un expediente por infracción de la Ley de Actividades. Posteriormente, inició la tramitación del expediente sancionador, que ha concluido con la sanción de 10.000 euros.
Este pasado mes de julio, la Policía inspeccionó el negocio y detectó que de nuevo funcionaba como discoteca o similar. Los agentes también comprobaron que se usaba un aparcamiento supuestamente ilegal.
Según la inspección el Ayuntamiento ha abierto un nuevo expediente contra el local, que actualmente está en fase de resolución de alegaciones.
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